RECETA PARA CURAR CORAZONES ROTOS

Han sido tantas las lágrimas y el esfuerzo para conseguir lo que tengo que me parece imposible que ahora lo vaya a dejar escapar porque ya no es lo que quiero, seguramente pensarás: ¿por niña caprichosa? puede ser, seguramente yo te diré: ¿por amor? indudablemente si. A veces me gustaría ser un robot y no sentir absolutamente nada porque ¿como se sigue andando con un corazón roto si quien lo está matando es quien le da la vida?, ¿de donde saco la fuerza para decidir si no hay ninguna opción buena? Quizá mi vida consista en volver a empezar de nuevo, sin recriminaciones y sin pasado porque volver hacia atrás nunca fue bueno, pero ¿y que pasa con lo de morir en la lucha? Pues que tal vez ya haya llegado la muerte. Y sino ¿cómo se recupera el amor y la confianza? Después de un día a día de llorar incansablemente y de mentiras que me destrozaron la vida llegó la época de los gritos por cualquier motivo, de los de donde vienes, a donde vas, de las dudas por todo… y llegados a este punto, ¿de que sirve continuar así? Poco tiene sentido ya. Si hemos dicho que la lucha ha muerto, entonces ¿qué queda? solo el dolor por lo que pudo haber sido y no fue, por las ilusiones depositadas en lo que iba a ser una vida plena y feliz, y solo rebuscar para encontrar fuerzas para seguir adelante.